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Ya casi no se vende, pero no queda de otra…

Ya casi no se vende, pero no queda de otra…

Ciudad de México, a 24 de marzo 2020 (NOTICIASCD.MX / PERIODISMOENACCION.COM).- Gilliana tiene un negocio de regalos, pero ella y su hijo Diego de 8 años se quedan en casa,

  • Publishedmarzo 24, 2020

Ciudad de México, a 24 de marzo 2020 (NOTICIASCD.MX / PERIODISMOENACCION.COM).- Gilliana tiene un negocio de regalos, pero ella y su hijo Diego de 8 años se quedan en casa, para no contagiarse. ‘La situación es delicada y creo que ya no podemos estar saliendo’, así lo aclara. Pero Leonardo, su pareja, tiene que salir a abrir el local, aunque las ventas hayan bajado desde hace más de una semana.

“Ya casi no se vende, pero alguien tiene que salir a buscar el sustento, prefiero que ella y Diego se queden en casa para cuidarnos. No podemos parar y, mucho menos, dejar de pensar que muy pronto esto se va a componer”, expresa Leonardo.

Para Octavio, propietario de un par de locales donde comercializa productos para animales de compañía, las ventas también han sufrido una caída de por lo menos la mitad desde que hace más de una semana se declaró que la mayoría de la gente debe permanecer en casa, en la medida de lo posible.

“La vedad es que nos ha pegado mucho a nosotros como pequeños comerciantes. Mi negocio lo inicié ya hace algunos años y estuve a punto de cerrar porque las cosas no iban bien, pero alguien me dijo que si sabía otra cosa qué hacer que lo cerrara, pero decidí mantenerlo y después pude abrir otro local, pero ahora, las cosas otra vez nos están pegando mucho. No sé hasta dónde vamos a aguantar. No hay ventas”, relata.

Arturo, también propietario de un negocio de venta de llantas en la ciudad y servicio preventivo de mecánica en general, la clientela ha bajado drásticamente a menos de la mitad. El día a día con sólo dos empleados se ha vuelto una situación casi insostenible, porque tiene que pagar sueldos cada semana, la renta del local cada mes y una serie de gastos que en apenas dos semanas ha tenido que recortar.

“La situación de por sí no era la mejor. Con el cambio que se hicieron a los Verificentros, la situación provocó que nosotros como mecánica general sufriéramos una caída en nuestros clientes, y ahora con esta situación, las cosas se complicaron más. Ya no puedo pagar sueldos y mucho menos la renta, no sé hasta dónde vamos a llegar. Pero no queda de otra, tenemos que seguir abriendo ya aguantando la situación. En lo que menos pienso es en el contagio de esa enfermedad. Tengo que subsistir, tengo familia”, subraya.

Bruno, Gerente en una tienda de autoservicio, señala que no obstante a la situación el establecimiento tiene que abrir todos los días y reconoce la situación de pánico que ha generado la compra de productos en ese tipo de comercios.

“Ahora más que nunca tenemos que estar abriendo muy temprano. Las cosas se terminan muy rápido porque la gente hace las compras de pánico. La mercancía llega rápido y al medio día, o un poco después, ya se terminó casi todo. Lo que más se vende ahorita es la mercancía enlatada, frijol, arroz, huevo, verdura congelada, atún, entre otros productos”, anota.