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¿Convertirá Sheinbaum a CDMX en un pueblo bicicletero?

¿Convertirá Sheinbaum a CDMX en un pueblo bicicletero?

CDMX, a 18 de agosto 2020 (PERIODISMOENACCION.COM / NOTICIASCD.MX).- Con la involuntaria llegada de lo que se llamó “nueva normalidad”, se tuvieron que tomar con mayor seriedad otras alternativas de

  • Publishedagosto 18, 2020

CDMX, a 18 de agosto 2020 (PERIODISMOENACCION.COM / NOTICIASCD.MX).- Con la involuntaria llegada de lo que se llamó “nueva normalidad”, se tuvieron que tomar con mayor seriedad otras alternativas de movilidad para la Ciudad de México, la más popular y funcional hasta el momento es la bicicleta.

Además de trasporte e instrumento de diversión, desde siempre, la bicicleta ha impulsado muchos emprendimientos populares; panaderos, afiladores, tamaleros, repartidores de agua, ruleteros, además de empleos oficiales como carteros o policías; toda una economía que avanza a pedaleadas.

Esta realidad ciclista ya añeja en la ciudad, contrasta con la faceta modernista que adoptó la metrópoli con la llegada de bicicletas y monopatines sin anclaje.

Sin atreverme a generalizar, considero que quienes disfrutamos de esta lúdica, gratuita y saludable locomoción; celebramos que si bien de manera temporal, se ofrezcan más espacios para la movilidad en bici; aunque a decir de muchos usuarios, hace falta procurar mayor seguridad y exclusividad a esos espacios; no es raro ver las ciclovías invadidas por vehículos, peatones, comercio ambulante o patrullas.

El robo de estos vehículos también reporta crecimiento sostenido para situarse en el orden de cinco al día. Quién esto escribe ha sido víctima de tres robos en los últimos años; el más reciente, propio de los Expedientes Secretos por el grado de sofisticación con que fue planeado y la pulcritud de su ejecución.

Mientras el gobierno central promueve el uso de la bicicleta, como en sentido contrario, la bancada morenista en el Congreso local negó a ciclistas y peatones la posibilidad de contratar una póliza de aseguramiento a través del Fondo Público de Atención al Ciclista y al Peatón. Se argumentó inviabilidad presupuestal y que los mayores beneficios serían para las aseguradoras.

Pese a ello, no dejan de registrarse acontecimientos que han exacerbado la inconformidad de la comunidad ciclista chilanga, muertes o lesiones por impunes atropellamientos, así como el reciente retiro masivo y futura destrucción de 140 triciclos de vendedores informales en Polanco.

Con la nueva normalidad la Ciudad de México tiene la oportunidad de marcar pauta al garantizar el derecho a la movilidad mediante innovadoras estrategias que promuevan la circulación en dos ruedas y que eventualmente impacten en otros sectores, como el económico.

Junto con la habilitación de ciclovías se puede generar una red de emprendimientos alusivos; tiendas, refaccionarias o talleres; que se ubiquen en las cercanías de los carriles para bicicletas. En eso pueden utilizarse los microcréditos que otorga SEDECO.

En el caso de los comerciantes retirados de Polanco, eventualmente podrían ofrecerse espacios delimitados y exclusivos para que diariamente se instalen; una especie de glorietas o camellones comerciales. Finalmente ofrecen un importante servicio para trabajadores de la zona que difícilmente pueden acceder a un restaurante.

Utópico quizá el planteamiento, hace falta una legislación adecuadas para dar garantías al ciclista y sancionar agresiones contra ellos, pero es necesaria también una normativa que les obligue a respetar un reglamento de circulación, con las respectivas sanciones.

Lo importante es que a cada pedaleada y sin dejar de lamentar los trágicos accidentes, poco a poco se ganan espacios para las bicicletas en la Ciudad de México, por parte de los ciclistas, creo que conviene afianzar bien el manubrio de nuestra seguridad y evitar caer en imprudencias. Nuestro derecho a la vía confluye con el derechos de otros, y a veces, es bueno bajar la velocidad o aplicar a fondo las palancas de freno.

Si lo pensamos a profundidad, somos más vulnerables que un vehículo, una motocicleta o incluso, un peatón.

Las autoridades decidirán que hacer en materia de movilidad en bicicleta, valorarán lo que merece prioridad, por lo pronto ya anunciaron que la permanencia de la ciclovía emergente en Insurgentes Sur dependerá del flujo vehicular, que tiende a subir.

Podrían también ejercer la legítima autoridad y poner orden con las aplicaciones de bicis y patines, o garantizar la aplicación de justicia para las víctimas y del reglamento para ciclistas. El uso de la bicicleta tiende a generalizarse pero conviene evitar su hipsterización y realmente promover un uso democrático. En la ciclovía de reforma, por ejemplo, bien puede circular un triciclo de tamales junto a una bicicleta de fibra de carbono.

Para usar uno de los términos favoritos de la cuatro te; con Claudia Sheinbaum, el pueblo capitalino tiene la posibilidad de convertirse en un gran pueblo bicicletero que sea ejemplo a otras ciudades.

Escribe: Enrique Serna Mondragón
@esernamx